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Control de esfínter

¿Cuándo es momento de dejar el pañal?

A lo largo del desarrollo evolutivo de tu hijo, buscarás otorgarle el espacio y las herramientas emocionales y de aprendizaje que necesite para alcanzar la independencia y la autonomía, de acuerdo a sus posibilidades. Pero qué pasa con el control de esfínter? Acaso puedes “enseñarle” a controlarlo?

Hoy en día, los estudios han comprobado que el control de esfínter es un proceso de maduración natural, que se ubica en líneas generales, entre los 24 y 36 meses de vida. Sin embargo, hay niños que lo logran antes y otros más tarde.

No debes preocuparte ni apurarte. Recuerda que así como no hay nada que puedas hacer para que tu niño sea más alto o tenga otro color de cabello, tampoco puedes adelantar los procesos fisiológicos que se relacionan con el desarrollo específico de cada ser humano.

Es por esto, que no sirve “aprovechar el verano para sacarle los pañales” o “sacarle el pañal para que registre que se hace pis”. Si su esfínter no está listo, si tu niño no ha tomado consciencia aún de que puede controlarlo, nada de todo esto va a ayudarlo. Todo lo contrario, se va a encontrar en situaciones incómodas, de exposición, sin la posibilidad de evitarlas o resolverlas, generando frustración y sensación de fracaso.

Mi sugerencia siempre es tener paciencia y acompañar cada proceso con confianza. A través de la observación de tu hijo, sus necesidades y comportamientos, podrás descubrir cuándo comienza a registrar este proceso. Comenzará por darse cuenta que hizo pis (en su pañal) y será su manera de avisarte que necesita uno nuevo. Luego, podrá registrar unos segundos antes de mojar el pañal, y te lo hará saber. Acompáñalo con palabras, describiendo el proceso.

Puedes higienizarlo en el baño, cuando él está de pie y colabora con la limpieza y el cambiado. Ese proceso, le dará independencia y transformará el momento de cambiar un pañal en un evento importante de su vida cotidiana; echando luz a un nuevo área de su vida: el control de esfínteres.

Recuerda: tu no le sacas el pañal, es el niño quien lo deja.

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