fbpx

La imagen en el espejo

Reconociendo la propia fisionomía

El espejo en la pared de la habitación de tu bebé es un elemento que le traerá interés y gran aprendizaje. Es muy importante que tomes los recaudos necesarios de seguridad, para que el espejo esté fijado sobre la pared de manera segura.

Verás la fascinación que le despierta a tu hijo verse reflejado en el espejo. Pasará largos ratos observando al niño del reflejo, los gestos y movimientos de su propia imagen, aún si al principio no se reconoce a sí mismo. Explorará sus gestos y descubrirá sus facciones en relación a distintas emociones. Por ejemplo, como se ve cuando sonríe, cuando llora o cuando emite un sonido. Inconscientemente estará relacionando su lenguaje corporal con el emocional que, más adelante unirá también al sistema de la expresión a través del lenguaje oral.

Verse en el espejo, será un gran estímulo para ejercitar los músculos de la espalda y cuello, que le permitirán levantar su cabeza cuando se encuentra boca abajo. Además, a través del reflejo, tu bebé podrá descubrir progresivamente, otros rincones del ambiente que no puede ver desde el lugar en donde se encuentra. Recuerda ubicar el espejo de manera tal que tu bebé pueda verse sin hacer un sobre-esfuerzo físico. O sea, que deberá estar sobre una pared cercana al lugar en donde suele estar cuando está despierto, ubicado desde el suelo o zócalo hasta unos 50 cm aproximadamente.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *